10 Consejos para mantener unos pies sanos

El Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV), ha señalado que un 70% de la población española padece algún tipo de enfermedad en los pies. Las dolencias como por ejemplo los callos, los juanetes o las durezas suelen afectar a siete de cada diez personas. Los pies suelen ser una de las partes de nuestro cuerpo a las que menos atención se les presta y, sin embargo, cualquier enfermedad que ocurra en ellos, puede determinar claramente la calidad de vida de las personas que la padezcan. Esto es especialmente destacable en el caso de las personas mayores,  debido a que con los años se desgasta la almohadilla plantar, aumentan las metatarsalgias (dolor en el antepié), y la aparición de duricias, en resumen, diversas patologías que aunque no son graves, pueden ser muy dolorosas al caminar, y pueden provocar caídas o úlceras en  las personas diabéticas.

A continuación, os proponemos algunas propuestas para mantener una adecuada salud en nuestros pies:

CONSEJOS PARA TENER UNOS PIES SANOS:

  1. Mantener una higiene diaria de los pies.
  2. Secarlos muy bien tras la ducha, especialmente prestando atención entre los dedos, puesto que el exceso de humedad favorece la proliferación de hongos y bacterias.
  3. Hidratarlos a diario, sobre todo el talón, y procurar no poner crema entre los espacios interdigitales (entre los dedos) porque los macera.
  4. Masajear los pies al aplicar crema nos ayudará a mejorar la circulación.
  5. No dejar las uñas largas.
  6. Utilizar calcetines de materiales naturales y sin costuras. Estos permiten que transpire mejor el pie y no dificultan la circulación.
  7. Optar por un calzado de piel que se adapte al ancho natural del pie,que sea cómodo, flexible, transpirable, con una planta acolchada, y que no tenga un tacón de más de 3 cm.
  8. Realizar algunos ejercicios específicos con regularidad. Es muy bueno trabajar los pies estirando y recogiéndolos, moviendo los dedos y girando los tobillos porque ayuda a tonificar los músculos, articulaciones y tendones.
  9. Los pies deben protegerse en espacios públicos con zonas húmedas como vestuarios, piscinas, utilizando chanclas o escarpines de goma para evitar las infecciones.
  10. Es fundamental visitar al menos una vez al año al podólogo para realizar una quiropodia, y comprobar que no existe ninguna patología,  por si ésta hubiera aparecido, aplicar rápidamente el tratamiento más adecuado para que no derive en una dolencia con mayores consecuencias.

 

fuente: icopcv

Esperamos que os resulte interesante.